DEBEMOS COMBATIR LA TRISTEZA


Existe un pecado que si nos descuidamos y dejamos de combatirlo, va a anidar en nuestro corazón y nos va a hacer enorme mal. Es la tristeza. 

El Libro Santo dice: "La tristeza no sirve para nada y sólo daños trae a la persona". Es necesario que no dejemos jamás de combatir contra la mala inclinación que tenemos de entristecernos por lo que no es pecado ni ofende a Dios. 

Así por ejemplo cuando alguien se enferma empieza a entristecerse por las molestias que les causan a quienes le atienden, pero cuando se mejora ya no se acuerda de esas caridades que le hicieron. Lo que le entristecía era su orgullo. 

Otros se dejan llevar por la tristeza diciendo que esos sufrimientos le están llegando como castigo de sus pecados, pero cuando recobre su salud ya verán qué tan poquito arrepentimiento siente por las maldades de su vida. 

Su tristeza no provenía de arrepentimiento sino de impaciencia. (1)

Cuántos hay que suspiran de tristeza porque no tienen mayores riquezas para dedicarse a hacer muchas obras de caridad, pero sí las tuvieran tampoco harían las tales obras. Es pues muy peligroso dejar de combatir contra la tristeza y dejarse vencer por esa pésima inclinación a vivir tristes. 

Y lo mismo hay que afirmar de cualquier otro vicio o pecado.

-----------------------------

Hay que aclarar que no es lo mismo tristeza que depresión, que es una enfermedad y hay que tratarla, en este caso no se ofende a Dios porque no está en nuestra mano.


(El combate espiritual, P. Lorenzo Scúpoli)


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

ORACIÓN PARA SER MISERICORDIOSOS

"Oh Señor, deseo transformarme toda en Tu misericordia y ser un vivo reflejo de Ti. Que este supremo atributo de Dios, es decir su inso...

ENTRADAS POPULARES