ORACIÓN A MARÍA, REINA DE LOS ÁNGELES, POR LAS ALMAS DEL PURGATORIO


 

María, Reina de los Ángeles, ten piedad de tus hijos que sufren en el Purgatorio. 

Envía a Tus Ángeles para que los ayuden.

Arcángel San Miguel, Arcángel San Gabriel, Arcángel San Rafael, los nueve coros de los Santos Ángeles, los Serafines y Querubines, los Tronos y las Dominaciones, los Príncipes y los Poderes, los Arcángeles y Ángeles, les pedimos, en nombre de Dios y en el nombre de su Reina, la Preciosísima Virgen María, que vayan rápido y ayuden a nuestros hermanos y hermanas en el Purgatorio. 

Ellos sufren mucha angustia, ellos tienen sed de Dios Eterno más que un siervo tiene sed del agua de una vertiente. 

Denles fuerzas y guíenlos hacia el camino del Padre celestial. Amén.

(Oraciones por las Almas del Purgatorio)

𝐌𝐀𝐑Í𝐀, 𝐋𝐀 𝐎𝐌𝐍𝐈𝐏𝐎𝐓𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀 𝐒𝐔𝐏𝐋𝐈𝐂𝐀𝐍𝐓𝐄

MARÍA, ERES LA OMNIPOTENCIA SUPLICANTE,

NO HAY NADA QUE TE PUEDA NEGAR TU HIJO SI SE LO PIDES TÚ, PORQUE LOS RUEGOS DE LOS SANTOS SON RUEGOS DE AMIGOS, PERO TUS RUEGOS SON RUEGOS DE MADRE.

MARÍA, OMNIPOTENCIA SUPLICANTE, QUE POR TU PETICIÓN ADELANTÓ TU HIJO "SU HORA"EN LAS BODAS DE CANÁ POR AGRADARTE, CONVIRTIENDO EL AGUA EN VINO, RUEGA POR NOSOTROS.




ORACIÓN POR LOS NIÑOS



Dios mío, en este día no puedo dejar de pensar en los niños, que son la semilla del mañana, la esperanza de un mundo mejor, un hermoso don dado por Ti.

Te pido por aquellos que están por nacer,  te pido por los que no han podido nacer a causa del aborto.

Te pido por los que son víctimas de los problemas familiares, violencia y maltratos, faltos de amor.

Por los niños que sufren el terror de la guerra y las persecuciones, que viven llenos de dolor, angustia y desesperación. Dales paz Señor.

Por los huérfanos, por los que son abandonados, rechazados, despreciados, humillados y no tienen una familia donde crecer con alegría, suscita familias que los puedan acoger.

Por los que no reciben educación porque tienen que trabajar desde pequeños y muchos son explotados y esclavizados, a veces sexualmente.

Te pido por los niños enfermos, sobretodo en los países pobres donde no tienen atención médica adecuada.

Por los que no tienen comida, no tienen un techo y deambulan por las calles, suplicando caridad, defiéndelos del maligno.

Por los que crecen educados en la ausencia de Dios.

Protégelos a todos, Señor.

Amén.

(Corazones Católicos)

SEÑOR, ANIMA MI CORAZÓN



Sálvame, oh Dios; las aguas me llegan hasta el cuello;

me hundo en el cieno del abismo, sin poder hacer pie;

he tocado fondo y el miedo se apodera de mi inseguridad;

las olas me cubren, me siento indefenso y solo.

Estoy exhausto de gritar y ardo de angustia;

mis ojos se apagan esperándote, oh Dios mío.

Tú conoces, Dios mío, mi torpeza y mis fracasos;

y sabes de verdad cómo mi corazón tiende hacia el pecado.

Estoy avergonzado de mi vida deshecha y rota,

y la confusión me envuelve y no encuentro salida.

Quiero luchar por el bien y me encuentro solo;

quiero ser honrado y honesto y se ríen de mí.

¿Cómo ser verdadero, Señor, en un mundo corrompido?

Se burlan de mí si hablo de oración y ayuno;

se mofan de mí si espero respuesta de Ti a mis problemas.

Con todo yo sigo fiel a tu ley y acepto tu palabra,

y quiero hacer de ella la norma de mi vida.

Por tu gran amor, respóndeme, Señor.

Libérame de mis ataduras,

y sácame de la situación en que me encuentro sumergido.

Vuelve tus ojos de ternura hacia mi desgracia,

pues tu amor es bondad y mano abierta al que a Ti clama.

En angustias y depresión estoy, sin ganas de vivir,

y me siento abatido, sin fuerzas, sin ganas de nada.

Me siento incomprendido, incomunicado y solo,

y el rechazo ha roto mi corazón y desfallezco de pena;

espero compasión y no la hay; espero ayuda, 

y nadie se me acerca;

espero a alguien que se siente a mi lado como amigo,

y todos pasan de mí, como si no existiera.

Los que parecían amigos, se han alejado como el viento;

y los que creía que eran fieles a mi amistad,

no cuento con ellos;

no me dejes solo, Tú que sabes de compasión

y misericordia;

acércate a mi dolor y desgana y anímame con tu Espíritu.

Tú te manifiestas al humilde y al sencillo,

y alegras su corazón y lo llenas de vida verdadera;

Tú escuchas el gemido de los pobres, los cautivos,

y les llenas de esperanza y les sientas a tu mesa.

Reconstruye, Señor, las murallas derribadas de mi vida;

ponme en pie y anima mi corazón que en Ti espera. 

(Oración inspirada en el Salmo 68)


QUÉ ES LA LITURGIA DE LAS HORAS

 


La Liturgia de las Horas es el conjunto de oraciones oficiales de la Iglesia católica fuera de la Misa, articuladas en torno a las horas canónicas.

Esta oración está encomendada con mandato específico fundamentalmente a sacerdotes y religiosos de todo tipo,  sin embargo, al ser la oración oficial de la Iglesia, es una oración propia de todo bautizado, también de los laicos.

A todo el conjunto que conforman estos rezos se les denomina Oficio divino, se puede decir también  que es la «voz de la Novia que habla a su Esposo» (Vaticano II). Al asociarnos a ella, damos ritmo a nuestros días con la Iglesia, participamos en su misión de alabanza e intercesión, estamos en comunión más estrecha con todos aquellos cuyo oficio es esta oración.

La Liturgia de las Horas es una pedagogía del Espíritu Santo, especialmente a través de los Salmos. Los rezamos en diálogo con Dios, le respondemos con sus propias palabras, con su Palabra.

Se distinguen en general dos niveles de celebración en la liturgia, las llamadas horas mayores o principales y las horas menores, según el Concilio Vaticano II: «Los Laudes y las Vísperas...se deben considerar y celebrar como las Horas principales, también se ha considerado el oficio de lecturas como hora mayor. 

Dentro de las horas menores podemos indicar las horas de Tercia, Sexta, y Nona además del rezo de Completas.

Cada hora está compuesta por los siguientes elementos:

Invocación Inicial

Himno

Salmodia (a la que se añaden en las horas mayores textos bíblicos no sálmicos llamados cánticos)

Lectura Bíblica (y Lectura Patrística en el oficio de lectura)

Responsorio

Cántico evangélico (Benedictus o Magnificat), las Preces y el Padre nuestro, estos sólo en el caso de Laudes y Vísperas.

Oración final y despedida.

Horas Mayores:

El Oficio de Lectura conocido antiguamente como Maitines, se puede rezar antes de Laudes o después.

Laudes corresponde a las alabanzas primeras de la mañana desde las 3:00 a.m. hasta las 9:00 a.m.

Vísperas desde las 6:00 p.m.

Horas Menores:

Horas intermedias:

Hora Tercia a las 9 de la mañana

Hora Sexta a las 12 del mediodía

Hora Nona a las 3 de la tarde

Las Completas se rezan de noche antes de irse a dormir.

(Wikipedia y Aciprensa)


Entrada destacada

ORACIÓN PARA SER MISERICORDIOSOS

"Oh Señor, deseo transformarme toda en Tu misericordia y ser un vivo reflejo de Ti. Que este supremo atributo de Dios, es decir su inso...

ENTRADAS POPULARES