VISITA AL SANTÍSIMO


 

Señor mío Jesucristo, que por amor a los hombres permaneces, lleno de amor, en este Sacramento, de día y de noche, esperando, llamando y recibiendo a cuantos vienen a visitarte. Creo que estás presente en el Santísimo Sacramento del altar. Te adoro desde el abismo de mi nada.

Te doy gracias por todos los beneficios que me has hecho, especialmente por haberme dado en este Sacramento tu Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad; por haberme concedido como abogada a tu Santísima Madre la Virgen María y por haberme llamado a que te visite en este lugar santo.

Adoro tu Corazón lleno de amor, en agradecimiento a tan maravilloso regalo; y para desagraviarte de tantos ultrajes como recibes en todos los sagrarios del mundo donde estás olvidado.

Señor Jesús, te amo con todo mi corazón; me pesa haber ofendido tantas veces a tu infinita bondad, y propongo enmendarme con ayuda de tu gracia. Yo, pecador, me consagro todo a Ti, y en tus manos pongo mi voluntad, mis afectos, mis deseos, y todo cuanto soy y puedo. Todo lo uno a tu Corazón lleno de amor, y así lo ofrezco al Padre Eterno, y le pido, en tu Nombre y por el amor que te tiene, lo acepte benignamente. Amén.

(San Alfonso María de Ligorio)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

𝐄𝐋 𝐌𝐈𝐋𝐀𝐆𝐑𝐎 𝐄𝐔𝐂𝐀𝐑Ɩ́𝐒𝐓𝐈𝐂𝐎 𝐃𝐄 "𝐄𝐋 𝐂𝐄𝐁𝐑𝐄𝐑𝐎" (𝐎 𝐂𝐄𝐁𝐑𝐄𝐈𝐑𝐎)

  En un día de invierno del año 1300 en el que nevaba abundantemente, un vecino de la localidad de Barxamaior, llamado Juan Santín, labriego...

ENTRADAS POPULARES