Del Diario de santa Faustina
La Divina Misericordia en mi alma


Oh, Dios mío
Cuando miro hacia el futuro, me atemorizo, Pero ¿por qué sumergirse en el futuro?

Para mi solamente el momento actual es de gran valor,
ya que quizá el futuro nunca llegue a mi alma.
El tiempo que ha pasado no está en mi poder. Cambiar, corregir o agregar,

no pudo hacerlo ningún sabio ni profeta,
así que debo confiar a Dios lo que pertenece al pasado.
Oh momento actual, tú me perteneces por completo,
deseo aprovecharte cuanto pueda, y aunque soy débil y pequeña, 

me concedes la gracia de tu omnipotencia.                   
Por eso, confiando en Tu misericordia, camino por la vida como un niño pequeño

y cada día te ofrezco mi corazón inflamado del amor por Tu mayor gloria.  



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

ES UN DON PRECIOSO PADECER POR DIOS

Verónica Giuliani cuenta: El día de la fiesta de san Agustín de 1694 tuve por la noche una visión: Me pareció que el Señor con multitud de á...

ENTRADAS POPULARES